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AÑO II - Núm. 15. MARZO 1932. ________________________________________________________________________________
(Del periódico "La Perla de Valdepeñas" publicado entre los años 1931-1935. Dirigido por el Beato P. José Agustín Fariña, OSA. Martir en la guerra del 1936).
A SOR MARÍA CÁNDIDA
Del jardín Agustiniano
Eres perla esclarecida
Flor aromática y bella
Y de fragancia exquisita
Lirio esbelto y arrogante,
Azucena blanca y limpia
Conjunto y compendio toda
De las virtudes más finas.
¿Cómo extrañar ya los mimos
de tu Niño del Consuelo?
Le robaste el corazón
y ahora robas los nuestros.
Sor Mª Aunción del Buen Consejo
Agustina
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262.- Doña Carmen Santa María y Merlo (129 y 130)
263.- Doña Fernanda Santa María y Merlo (129 y 130)
264.- Doña Consuelo Santa María y Merlo (129 y 130)
265.- D. Vicente Santa María y Merlo (129 y 130)
266.- Doña Dolores Santa María y Merlo (129 y 130)
267.- D. Guillermo Santa María y Merlo (129 y 130)
268.- Doña Purificación Vasco y Merlo (131 y 132)
269.- Doña María Vasco y Merlo (131 y 132)
270.- D. Juan Bautista Vasco y Merlo Abogado (131 y 132)
271.- D. Fernando Vasco y Merlo (131 y 132)
272.- D. Antonio José Vasco y Merlo (131 y 132)
273.- Doña María Josefa Vasco y Merlo (131 y 132)
274.- Doña María Jesús Merlo y Nuñez (132 y 134)
275.- Doña Enriqueta Merlo y Nuñez (133 y 134)
276.- Doña Pilar Merlo y Nuñez (133 y 134)
277.- Doña Rosa Merlo y Nuñez (133 y 134)
278.- Doña Dolores Merlo y Nuñez (133 y 134)
279.- D. Vicente Merlo y Nuñez (133 y 134)
280.- Doña Angela Merlo y Nuñez (133 y 134)
281.- Doña Luisa Lasala y Recuero (135 y 136)
Casó con (282) D. Cirilo Frías del Río.
282.- D. Cirilo Frías del Río. Casó con (281)
Doña Luisa Lasala y Recuero.
283.- Doña María Lasala y Recuero (135 y 136).
Casó con (284) D. Aníbal Lopez Tello.
284.- D. Aníbal López Tello. Casó con (283)
Doña María Lasala y Recuero.
285.- D. Juan José Lasala y Recuero (135 y 136).
286.- Doña Mercedes Lasala y Maroto (137 y 138).
287.- Doña Natividad Lasala y Maroto (137 y 138).
288.- Doña Concepción Lasala y Maroto (137 y 138).
289.- Doña Eufrasia Lasala y Maroto (137 y 138).
290.- D. Luis Lasala y Maroto (137 y 138).
291.- Doña Rafaela Lasala y Maroto (137 y 138).
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NUESTRO GRABADO
Tienen en su poder las monjas Agustinas de Valdepeñas un cuadro de grandes dimensiones, cuya reproducción representa el grabado de este número de La Perla. El cuadro carece completamente de arte y de mérito, pero representa un hecho histórico debidamente comprobado por la autoridad eclesiástica el mismo día de su realización, y ello basta para que resulte de interés para los admiradores de Sor María Cándida, tanto más cuanto que dicho cuadro tiene el sello de la antigüedad, y, aunque no hemos tratado de averiguar su origen, debe remontarse a los días de la fundación del convento de Valdepeñas. El hecho lo relata la Vida en estos términos: "Fue especialmente devota de San Diego de Alcalá, cuya devoción tuvo en ella origen del modo siguiente. Pasaba un día la Madre Sor María de San Agustín por el claustro, y viendo un cuadro de San Diego, que no estaba muy bien pintado, preguntó: "-¿Qué Santo es ése?", y la contestaron: "-San Diego", replicando ella: "-¡Qué feo es!". Por la noche, estando ella descuidada, se le apareció este Santo, y preguntándole: "-¿Tú, quien eres?", contestó: "- Soy San Diego, que aunque feo, vengo a verte." Desde entonces quedaron muy amigos y era su protector especial, recibiendo de él para sí y para otras personas muchos favores.
Entre éstos fue muy especial la curación milagrosa que este Santo obró en ella a la media noche del 11 de Noviembre de 1828. Después de dos meses de gravísimos padecimientos a causa de muy graves y complicadas enfermedades mortales, se hallaba Sor María Cándida completamente desahuciada de los médicos y recibidos devotamente los Santos Sacramentos, a punto de expirar. A las seis de la tarde quedó con la cabeza en medio de la cama y con las rodillas tocando casi con la barbilla, hecha un ovillo y sin poderse mover; en esta postura quedó en éxtasis hasta las nueve de la noche y de él salió riendo, con los ojos hermosísimos y diciendo: "-Han estado aquí San Diego, el beato Julián de San Agustín y Santa Teresa, y el primero me ha dicho que no me ponga las bayetas, ni las aguas emolientes, porque no las necesitas". Con el confesor que tenía entonces, el Trinitario P. Lorenzo, estuvo hasta las once y media, y luego un cuarto de hora con la Madre Maestra, con la cual empezó a hablar. A Sor Dolores de Jesús, que durmiendo en la misma celda decía: "-Calla, que no me dejas dormir", contestó: "- Voy a ir mañana al coro, voy a ayunar y a comer de viernes". Después dijo a la Maestra: "- Hay aquí un fraile, que es San Diego"; y la Maestra le ordenó: "- Reza una Salve a la Virgen y el Magníficat." Concluido este cántico, que rezó alternando con San Diego, éste, cuya reliquia le habían aplicado y ella había venerado, le puso la mano en el pecho y le dijo: "- Levántate y anda", y ella, con gran velocidad, se levantó en el acto y quedó completamente sana; hecho ruidoso, de cuya verdad, a instancia del Vicario General de Alcalá, certificó al día siguiente el médico del convento, D. Mariano del Gras, profesor de medicina en dicha ciudad.
Era tal después de este suceso la sabiduría de Sor María Cándida de San Agustín, que pasmaba a los mayores teólogos, los cuales decían que no era ella la que hablaba, sino Dios en ella. Todos buscaban su consejo, y ella le daba con gran caridad a toda clase de personas.
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Oración
¡Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo!
que de tantas maneras has manifestado tu Omnipotencia
y Misericordia en favor de los hombres: escucha mis ruegos
en la necesidad que ahora siento y por los méritos e intercesión
de la V.M. Cándida de San Agustín, concededme la gracia que
pido si ha de ser para tu mayor gloria y bien de mi alma. Amén
(Hágase la petición y récense tres Gloria Patri)
Rogamos nos comuniquen las gracias recibidas por intercesión
de la Sierva de Dios Madre Cándida de San Agustín.
Pueden dirigirse a: MONASTERIO DE SAN DIEGO,
MM. AGUSTINAS, c/ Convento, 1
13300 Valdepeñas
(Ciudad Real) ESPAÑA
Tel. 926 32 21 05
Quienes deseen ayudar, con sus limosnas, a la causa de canonización de la Sierva de Dios, y a los gastos de edición de libros, estampas y reliquias, para dar a conocer su vida y propagar su devoción, pueden enviar sus donativos a nuestro Monasterio, por giro postal o por transferencia Bancaria a la cuenta corriente número:
POPULAR IBAN ES12 / 0075 / 0556 / 52 / 0700777973
Arbol Genealógico de Sor Cándida
por D. Eusebio Vasco262.- Doña Carmen Santa María y Merlo (129 y 130)
263.- Doña Fernanda Santa María y Merlo (129 y 130)
264.- Doña Consuelo Santa María y Merlo (129 y 130)
265.- D. Vicente Santa María y Merlo (129 y 130)
266.- Doña Dolores Santa María y Merlo (129 y 130)
267.- D. Guillermo Santa María y Merlo (129 y 130)
268.- Doña Purificación Vasco y Merlo (131 y 132)
269.- Doña María Vasco y Merlo (131 y 132)
270.- D. Juan Bautista Vasco y Merlo Abogado (131 y 132)
271.- D. Fernando Vasco y Merlo (131 y 132)
272.- D. Antonio José Vasco y Merlo (131 y 132)
273.- Doña María Josefa Vasco y Merlo (131 y 132)
274.- Doña María Jesús Merlo y Nuñez (132 y 134)
275.- Doña Enriqueta Merlo y Nuñez (133 y 134)
276.- Doña Pilar Merlo y Nuñez (133 y 134)
277.- Doña Rosa Merlo y Nuñez (133 y 134)
278.- Doña Dolores Merlo y Nuñez (133 y 134)
279.- D. Vicente Merlo y Nuñez (133 y 134)
280.- Doña Angela Merlo y Nuñez (133 y 134)
281.- Doña Luisa Lasala y Recuero (135 y 136)
Casó con (282) D. Cirilo Frías del Río.
282.- D. Cirilo Frías del Río. Casó con (281)
Doña Luisa Lasala y Recuero.
283.- Doña María Lasala y Recuero (135 y 136).
Casó con (284) D. Aníbal Lopez Tello.
284.- D. Aníbal López Tello. Casó con (283)
Doña María Lasala y Recuero.
285.- D. Juan José Lasala y Recuero (135 y 136).
286.- Doña Mercedes Lasala y Maroto (137 y 138).
287.- Doña Natividad Lasala y Maroto (137 y 138).
288.- Doña Concepción Lasala y Maroto (137 y 138).
289.- Doña Eufrasia Lasala y Maroto (137 y 138).
290.- D. Luis Lasala y Maroto (137 y 138).
291.- Doña Rafaela Lasala y Maroto (137 y 138).
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NUESTRO GRABADO
Tienen en su poder las monjas Agustinas de Valdepeñas un cuadro de grandes dimensiones, cuya reproducción representa el grabado de este número de La Perla. El cuadro carece completamente de arte y de mérito, pero representa un hecho histórico debidamente comprobado por la autoridad eclesiástica el mismo día de su realización, y ello basta para que resulte de interés para los admiradores de Sor María Cándida, tanto más cuanto que dicho cuadro tiene el sello de la antigüedad, y, aunque no hemos tratado de averiguar su origen, debe remontarse a los días de la fundación del convento de Valdepeñas. El hecho lo relata la Vida en estos términos: "Fue especialmente devota de San Diego de Alcalá, cuya devoción tuvo en ella origen del modo siguiente. Pasaba un día la Madre Sor María de San Agustín por el claustro, y viendo un cuadro de San Diego, que no estaba muy bien pintado, preguntó: "-¿Qué Santo es ése?", y la contestaron: "-San Diego", replicando ella: "-¡Qué feo es!". Por la noche, estando ella descuidada, se le apareció este Santo, y preguntándole: "-¿Tú, quien eres?", contestó: "- Soy San Diego, que aunque feo, vengo a verte." Desde entonces quedaron muy amigos y era su protector especial, recibiendo de él para sí y para otras personas muchos favores.
Entre éstos fue muy especial la curación milagrosa que este Santo obró en ella a la media noche del 11 de Noviembre de 1828. Después de dos meses de gravísimos padecimientos a causa de muy graves y complicadas enfermedades mortales, se hallaba Sor María Cándida completamente desahuciada de los médicos y recibidos devotamente los Santos Sacramentos, a punto de expirar. A las seis de la tarde quedó con la cabeza en medio de la cama y con las rodillas tocando casi con la barbilla, hecha un ovillo y sin poderse mover; en esta postura quedó en éxtasis hasta las nueve de la noche y de él salió riendo, con los ojos hermosísimos y diciendo: "-Han estado aquí San Diego, el beato Julián de San Agustín y Santa Teresa, y el primero me ha dicho que no me ponga las bayetas, ni las aguas emolientes, porque no las necesitas". Con el confesor que tenía entonces, el Trinitario P. Lorenzo, estuvo hasta las once y media, y luego un cuarto de hora con la Madre Maestra, con la cual empezó a hablar. A Sor Dolores de Jesús, que durmiendo en la misma celda decía: "-Calla, que no me dejas dormir", contestó: "- Voy a ir mañana al coro, voy a ayunar y a comer de viernes". Después dijo a la Maestra: "- Hay aquí un fraile, que es San Diego"; y la Maestra le ordenó: "- Reza una Salve a la Virgen y el Magníficat." Concluido este cántico, que rezó alternando con San Diego, éste, cuya reliquia le habían aplicado y ella había venerado, le puso la mano en el pecho y le dijo: "- Levántate y anda", y ella, con gran velocidad, se levantó en el acto y quedó completamente sana; hecho ruidoso, de cuya verdad, a instancia del Vicario General de Alcalá, certificó al día siguiente el médico del convento, D. Mariano del Gras, profesor de medicina en dicha ciudad.
Era tal después de este suceso la sabiduría de Sor María Cándida de San Agustín, que pasmaba a los mayores teólogos, los cuales decían que no era ella la que hablaba, sino Dios en ella. Todos buscaban su consejo, y ella le daba con gran caridad a toda clase de personas.
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Oración
¡Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo!
que de tantas maneras has manifestado tu Omnipotencia
y Misericordia en favor de los hombres: escucha mis ruegos
en la necesidad que ahora siento y por los méritos e intercesión
de la V.M. Cándida de San Agustín, concededme la gracia que
pido si ha de ser para tu mayor gloria y bien de mi alma. Amén
(Hágase la petición y récense tres Gloria Patri)
Rogamos nos comuniquen las gracias recibidas por intercesión
de la Sierva de Dios Madre Cándida de San Agustín.
Pueden dirigirse a: MONASTERIO DE SAN DIEGO,
MM. AGUSTINAS, c/ Convento, 1
13300 Valdepeñas
(Ciudad Real) ESPAÑA
Tel. 926 32 21 05
Quienes deseen ayudar, con sus limosnas, a la causa de canonización de la Sierva de Dios, y a los gastos de edición de libros, estampas y reliquias, para dar a conocer su vida y propagar su devoción, pueden enviar sus donativos a nuestro Monasterio, por giro postal o por transferencia Bancaria a la cuenta corriente número:
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