Jesús en el Seno de María
Estribillo
Niño hermoso del Consuelo
enséñanos la humildad,
pues ella sola en verdad
te obligó a bajar del cielo
1º Gozo
El Grande, el Omnipotente,
el admirable y el Sabio,
prisionero voluntario,
desde un palacio eminente,
de una doncella en el vientre,
se encierra con grande anhelo.
el admirable y el Sabio,
prisionero voluntario,
desde un palacio eminente,
de una doncella en el vientre,
se encierra con grande anhelo.
Estribillo
2º Gozo
En el claustro virginal,
pasible y anonadado,
en tan abatido estado,
ya es mortal el inmortal.
Esta humildad sin igual,
echó a nuestra culpa un velo..
pasible y anonadado,
en tan abatido estado,
ya es mortal el inmortal.
Esta humildad sin igual,
echó a nuestra culpa un velo..
Estribillo
3º Gozo
Allí le admiro Isaías,
y admirable le llamó,
pues asombrado advirtió,
mudo la sabiduría,
allí con el hombre hacía
y este Niño un paralelo.
y admirable le llamó,
pues asombrado advirtió,
mudo la sabiduría,
allí con el hombre hacía
y este Niño un paralelo.
Estribillo
4º Gozo
En el instante primero
de su santa encarnación,
vio claro la obstinación,
del mundo ingrato y grosero
y a los filos de este acero,
crecía su ansia y su celo.
de su santa encarnación,
vio claro la obstinación,
del mundo ingrato y grosero
y a los filos de este acero,
crecía su ansia y su celo.
Estribillo
5º Gozo
Veía con claridad
que de sus humillaciones,
no sacaría lecciones,
nuestra obstinada maldad.
Sentía la ceguedad
del que peca sin recelo.
que de sus humillaciones,
no sacaría lecciones,
nuestra obstinada maldad.
Sentía la ceguedad
del que peca sin recelo.
Estribillo
6º Gozo
Las ofensas que se hacían
a su Padre celestial
era un dolor sin igual
que su corazón hería.
Su congoja recrecía
con profundo desconsuelo.
a su Padre celestial
era un dolor sin igual
que su corazón hería.
Su congoja recrecía
con profundo desconsuelo.
Estribillo
7º Gozo
Estas penas y dolores,
a su grande comprensión,
más que los de su pasión
aumentaban sus temores,
hablaba a los pecadores
cuyo bien era su anhelo.
a su grande comprensión,
más que los de su pasión
aumentaban sus temores,
hablaba a los pecadores
cuyo bien era su anhelo.
Estribillo
8º Gozo
Grandes lecciones nos da
Jesús, desde allí encerrado,
su consuelo está cifrado
en que amemos la humildad,
sin esta virtud será
nuestra virtud recelo.
Jesús, desde allí encerrado,
su consuelo está cifrado
en que amemos la humildad,
sin esta virtud será
nuestra virtud recelo.
Estribillo
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